El área de gestión de Recursos Humanos es una de las más importantes para la buena marcha de cualquier negocio: de ella depende la calidad del clima de trabajo, la consecución de los objetivos definidos por la empresa, su crecimiento y mejora… así como la reducción de riesgos legales en materia laboral. Para que tengas clara la importancia de este departamento, en este artículo te contamos qué son los RRHH, qué hacen en una empresa, cómo se organizan y cómo la tecnología ayuda en la gestión laboral y de Recursos Humanos.
- Qué son los Recursos Humanos: definición y objetivos
- Qué hace Recursos Humanos: funciones principales
- La gestión del talento: cómo atraer, seleccionar y retener a los mejores empleados
- La gestión de la nómina
- La formación y el desarrollo del personal: cómo mejorar las habilidades y competencias de los empleados
- Evaluación del desempeño: cómo medir el rendimiento y establecer objetivos
- Gestión del clima laboral
- Tendencias retos y oportunidades actuales en RRHH
- Ventajas de una buena gestión de Recursos Humanos
- Normativa laboral reciente en Recursos Humanos
- Soluciones para la gestión laboral y de la nómina
Qué son los Recursos Humanos: definición y objetivos
Los Recursos Humanos (RRHH) se definen, en el marco empresarial, como el conjunto de trabajadores dentro de un determinado negocio. Una segunda acepción es la que hace referencia al departamento encargado de gestionar todos los trámites y necesidades relacionados con el conjunto de trabajadores de un negocio.
Este departamento puede existir dentro de la empresa (hablamos entonces de departamento de Recursos Humanos), algo más frecuente en las pymes de cierto tamaño y en las grandes empresas, siempre que exista un volumen de trabajadores y/o una complejidad en la gestión laboral que demanden una dirección interna. En los negocios más pequeños, la gestión de RRHH puede delegarse en empresas especializadas, ya sean despachos profesionales o asesorías que ejerzan también el papel de asesor laboral.
El principal objetivo de los Recursos Humanos consiste precisamente en mantener bajo control todas las cuestiones relacionadas con la fuerza laboral de la empresa, tanto desde el punto de vista estrictamente laboral y legal como desde una óptica más subjetiva: un buen ambiente de trabajo y, en última instancia, una mejor productividad y felicidad para todos, forman parte de las metas para cualquier área de RRHH.
Qué hace Recursos Humanos: funciones principales
Para saber en profundidad qué significa RRHH es importante conocer las tareas el Departamento de Recursos Humanos.
El punto de partida es que no solo se trata de mantener bajo control todo el papeleo administrativo y legal relacionado con los trabajadores: impulsar la formación de los empleados o diseñar incentivos y políticas internas innovadoras para mejorar su día a día y su implicación en la empresa son otras de las tareas de este departamento.
También es importante que el área de Recursos Humanos permita la promoción interna y el aprendizaje continuo, así como medir y analizar la calidad del trabajo desempeñado y buscar mejoras que permitan a los empleados seguir desarrollándose y ubicase en el puesto más correcto.
Además, el área de Recursos Humanos debe ejercer un labor de comunicación interna y de promoción de la cultura corporativa, así como velar por un buen clima laboral. Ello pasa por crear los canales necesarios para que el flujo de información sea bidireccional y lo más horizontal posible, permitiendo a los trabajadores aportar ideas y plantear quejas o dudas.
La gestión del talento: cómo atraer, seleccionar y retener a los mejores empleados
Un aspecto clave en la gestión de Recursos Humanos consiste en atraer talento y mantenerlo en la empresa. Para ello es necesario un proceso de selección cuidadoso, que puede incluir estrategias de employer branding, así como la búsqueda de mejoras e incentivos para el empleado que le permitan desarrollarse y seguir creciendo internamente.
Algunas herramientas para lograrlo consisten en trabajar en la marca de cada empleado, ofrecerle formación a medida y continuada, fomentar la promoción interna y la comunicación de ideas… El resultado será una mayor vinculación emocional del trabajador a la marca empresarial, convirtiéndole en un embajador natural de la empresa.
La gestión de la nómina
Una correcta gestión de la nómina es fundamental en cualquier negocio e incluye la recopilación y el registro de la información de los empleados, las horas que han trabajado, impuestos, deducciones y otros beneficios. Con una buena gestión de esta tarea básica los empleados reciben el pago por su trabajo de forma precisa y adecuada, lo que contribuye en su satisfacción y ayuda a retener el talento en la empresa.
Pero además, hacer una nómina también implica cumplir con obligaciones legales y fiscales de acuerdo con la normativa vigente. De no ser así la empresa podría enfrentar sanciones que podrían comprometer su imagen, su reputación y su viabilidad. En este sentido, la tecnología se ha convertido en una gran aliada para alcanzar esta meta: gracias al diseño de software de RRHH se puede automatizar ésta tarea, reducir el riesgo de cometer errores y liberar tiempo para dedicarlo a impulsar mejoras y a innovar.
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La formación y el desarrollo del personal: cómo mejorar las habilidades y competencias de los empleados
Una de las herramientas para mejorar la gestión de Recursos Humanos consiste en fomentar la formación y el desarrollo del personal, algo que pasa necesariamente por ofrecer espacios de aprendizaje que no solo respondan a las necesidades y metas de la empresa, sino también a los deseos, inquietudes y habilidades del propio empleado. Plantearnos e invertir en la experiencia del empleado como inversión a futuro.
Cada día existen opciones más creativas a la hora de hacer cumplir este objetivo, incluyendo experiencias de grupo, coaching para mejora en áreas específicas, cursos y seminarios de formación, mentoring… La clave consiste en identificar qué instrumento resulta más útil a la hora de alcanzar el objetivo pretendido, sin perder de vista la necesidad de escuchar las ideas de los propios trabajadores al respecto.
Evaluación del desempeño: cómo medir el rendimiento y establecer objetivos
Otro aspecto clave en la gestión de Recursos Humanos pasa por medir el rendimiento de los trabajadores, así como fijar metas u objetivos concretos que permitan cuantificar qué empleados o departamentos resultan más eficientes, cuáles presentan una mayor calidad en sus resultados… De esta forma podremos implementar mejoras y replicar las dinámicas de aquellas áreas que mejor funcionen.
Todo ello sin perder de vista que no se trata de conseguir el máximo rendimiento, sino de alcanzar un necesario equilibro entre las necesidades de la empresa y las del trabajador. Solo así podremos implantar tendencias como el smart working y podrán establecerse relaciones contractuales duraderas, basadas en el entendimiento y en la voluntad y el respeto entre todas las partes implicadas. Muchas veces la baja productividad se relaciona directamente con la falta de motivación del empleado.
Gestión del clima laboral
En cuanto al clima laboral en la empresa, cuidarlo es algo que comienza en una fase tan temprana como la propia selección de personal: el proceso de contratación debe tener en cuenta las necesidades de cada departamento y los perfiles de empleado que deberán trabajar de forma cercana. Un espacio agradable, unas condiciones laborales justas, una buena comunicación son otros factores que deben tenerse siempre en cuenta.
Además, resulta de gran utilidad facilitar espacios de socialización en la oficina, diseñar una política empresarial coherente y ética, que evite la discriminación o el edadismo, promover la participación de los empleados en la cultura empresarial y el debate acerca de cómo mejorarla, realizar encuestas de clima laboral o habilitar opciones como el anticipo de nómina para los trabajadores. La tolerancia, la diversidad y la búsqueda de soluciones innovadoras y a medida de las necesidades de trabajadores, son otros instrumentos clave para mejorar el salario emocional.
